El FC Sankt Pauli es uno de los clubes de fútbol más peculiares y carismáticos de toda Europa. Se trata de un equipo alemán de la 2.Bundesliga que se ha ganado el cariño de los aficionados a este deporte, hasta el punto de convertirse en un referente mundial y ser catalogado como un club de culto. Los “Piratas del Elba”, sobrenombre con el que se le conoce, navegan contra viento y marea para promover una filosofía deportiva bastante atípica, basada en la lucha contra el fútbol moderno y el capital. Además, el FC Sankt Pauli es algo más que fútbol, debido a su marcado compromiso social e ideológico.
Por Nacho Casado Chozas
Revista Indiscretos
Este singular equipo de fútbol está ubicado en Sankt Pauli. Es un barrio de la ciudad alemana de Hamburgo que se encuentra en las cercanías del Mar del Norte. Se halla en el distrito de Hamburg-Mitte, tiene una población de 27.000 habitantes y es conocido coloquialmente como el “Kiez” (barrio en alemán). Se trata de un área muy reivindicativa y rebelde, pero esta calificación no es de ahora, siempre ha sido lugar de residencia para las minorías que han vivido en Hamburgo desde su fundación en el siglo XVII. Los primeros pobladores, personas de clase baja que llegaban atraídas por la actividad portuaria, han dejado su sitio a los punks y okupas, que conviven en fraternidad con familias de clase obrera, estudiantes, inmigrantes y jóvenes que comienzan a independizarse. También es refugio de numerosos poetas, escritores y artistas, demostrando su estilo bohemio.
St. Pauli es uno de los barrios rojos más famosos de Europa por el que han pasado gran diversidad de artistas, músicos y escritores. Es el centro neurálgico de la vida nocturna de Hamburgo. Una de sus calles más famosas es Reeperbahn, conocida como la “die sündige Meile” (“la milla del pecado”). Las calles Hafenstraße y Herbertstraße, junto a la anteriormente mencionada, son las principales arterias del barrio que se caracterizan por la presencia de meretrices, sex-shops, discotecas, pubs y restaurantes. Herbertstraße, “la calle de las prostitutas”, tiene algunos aspectos históricos muy curiosos. Se trata de una pequeña avenida que ha pasado a la historia por ser la única en la que se ejercía la prostitución durante la Alemania de Hitler, periodo en el que se prohibió este negocio. En 1933 el ejército alemán instaló unos reflectores de luz que impedían ver con claridad lo que ocurría en esa zona, estos focos luminosos permanecen en la actualidad. Además, hay carteles en sus dos entradas que prohíben la entrada a menores de edad y mujeres que no se dediquen a la prostitución, aunque es una calle pública por la que cualquiera puede pasar.
Hamburgo tiene el puerto más importante de Alemania y uno de los más grandes del mundo. Esta ciudad es conocida como “la puerta de Alemania al mundo”. Por sus calles discurre el río Elba, navegable desde el tramo superior hasta su desembocadura. La piratería y el pillaje siempre han tenido presencia importancia en el Mar del Norte, donde fue el gran bastión de los pueblos nórdicos. Este es el motivo por el que se conoce al FC Sankt Pauli como los “Piratas del Elba”. Esta ciudad siempre ha dependido económicamente de su puerto y es un enclave típicamente costero. Muchos de los nombres de sus calles provienen de actividades relacionadas con la navegación. Además, el negocio del sexo, por el que es conocido Sankt Pauli, es una respuesta a su actividad portuaria. Históricamente, las ciudades con puerto marítimo han estado ligadas a la prostitución y a las tascas, formándose los famosos barrios rojos. El orgullo marinero de Hamburgo llega hasta su actividad cervecera, ya que una de las dos marcas de la ciudad, llamada Astra, es conocida como la “cerveza de los marineros”. Su logotipo es un marinero que tiene un tatuaje de un ancla dentro de un corazón, también es patrocinador oficial del FC Sankt Pauli desde hace muchas temporadas.
Este barrio ha sido siempre un lugar de referencia para la cultura. Toda la zona está repleta de teatros donde se interpretan obras y musicales de gran prestigio. Cuando paseas por sus calles, puedes apreciar que el arte callejero está muy vivo. En cada contenedor, esquina o edificio puedes encontrar un mural, graffiti o una fachada redecorada. El arte del spray es uno de los sellos de Sankt Pauli, lo que le ha convertido en un referente en Alemania. Únicamente está a la sombra de Berlín, donde en los barrios de las okupas, distritos del sur y este de la ciudad se puede apreciar el buen trabajo de grandes artistas. Por eso, este barrio hanseático tiene similitudes con Chirstiania o Candem Town, barrios con mucha esencia artística y callejera.
En las calles de St. Pauli se respira rock y punk, hay multitud de bares donde puedes tomar una jarra de cerveza al ritmo de grupos como Rammstein, The Adicts o The Misfits. En sus callejuelas hay multitud de librerías y tiendas relacionadas con la música, además de ser un lugar que marcó la carrera profesional de The Beatles. La banda de Liverpool se dio a conocer en Europa en el Star Club, un local de la calle Reeperbahn. La banda inglesa visitó en numerosas ocasiones el barrio de St. Pauli, en el que también actuaron en los pubs Indra Club y Top Ten, los más populares de la zona junto al mencionado anteriormente. Tanto les influyó este barrio hanseático que John Lennon afirmó: "Tal vez nací en Liverpool, pero lo que es seguro es que maduré en Hamburgo”. Las historias más desenfrenadas de la banda inglesa tuvieron lugar en las calles de Sankt Pauli, como cuando John Lennon tocó una noche en calzoncillos mientras George Harrison le seguía el ritmo con una tapa de váter como collar. En recuerdo a la banda inglesa se contruyó la Beatles-Platz.
FC Sankt Pauli: el fútbol del pueblo
El FC Sankt Pauli es un equipo muy especial que encarna la esencia que caracteriza al barrio que representa. Fue fundado en 1910 y juega como local en el Millerntor-Stadion, que se encuentra a pocos metros del muelle. Se trata de un pequeño club con una enorme masa social. Tiene 11 millones de seguidores en Alemania y alrededor de 500 clubes de aficionados por todo el mundo, entre los que podemos encontrar cuatro en España, destacando la
Peña El Grano de Valladolid, una de las más activas de Europa. Además de tener su escudo propio, la institución, sus aficionados y el barrio utilizan la bandera Jolly Roger, con el cráneo y las dos tibias cruzadas, como símbolo alternativo del barrio y del equipo. Los banderines de córner están engalanados con la bandera pirata y en la tienda oficial del club hay diversas líneas de ropa con este símbolo. La peculiaridad también llega a su vestimenta, los colores del equipo son el blanco, rojo y marrón, siendo este último el principal en la mayoría de sus equipaciones. Se trata de un aspecto poco usual, ya que el marrón es un color nada deportivo y pocos clubes en el mundo lo utilizan.
Todos los aficionados que siguen al FC St. Pauli tienen una ideología muy variada donde confluyen anarquistas, comunistas y socialistas. Se convirtió en el primer club del mundo en perseguir y prohibir cualquier actividad de carácter fascista o nacionalsocialista. Tanto la directiva como la hinchada se declaran oficialmente antifascistas, antirracistas y antisexistas en sus estatutos, a pesar de encontrarse en un barrio donde el negocio de la prostitución tiene especial incidencia. Otro hecho significativo ocurrió en 2002, cuando la publicidad de la revista “Maxim” fue retirada del estadio en respuesta a las protestas de los hinchas, debido a las imágenes sexistas de mujeres en los anuncios. Un hecho que enorgullece al club es que cuenta con la mayor asistencia de mujeres a un estadio del fútbol alemán. Es una entidad que representa un liberalismo sexual muy innato en mundo del fútbol, el cual se suele caracterizar por su homofobia. Su anterior presidente, Corny Littmann, se declaró abiertamente gay y en el los partidos del St. Pauli no es difícil ver banderas del movimiento homosexual. Durante algunas temporadas, el equipo tuvo como patrocinador principal una empresa dedicada a la venta de productos eróticos, conllevando un gran revuelo en la Alemania más conservadora y tradicional.
Los hinchas piratas se caracterizan por tener un alto compromiso social. Realizan diferentes actividades y jornadas para recoger ropa, juguetes y alimentos para los más necesitados. Además, muchos aficionados y gente del entorno del FC Sankt Pauli ofertan cursos y actividades en las diversas casas okupas del barrio. Se trata de una afición muy rebelde y reivindicativa que participa en manifestaciones y actos muy variados, como por ejemplo, en apoyo a familias que van a ser desahuciadas o contra el cierre del Centro Social Rote Flora, hechos que han provocado
los disturbios acontecidos hace unos días entre los manifestantes y la policía, con la consiguiente declaración del estado de excepción en los barrios de Altona, St. Pauli y Sternschanze por parte de las autoridades de Hamburgo. Por tanto, este equipo es un icono mundial para la gente de izquierdas, antifascista y revolucionaria.
El FC Sankt Pauli y sus seguidores tienen un gran sentimiento de pertenencia a su barrio. Prueba de ello fue la organización de la FIFI Wild Cup, un torneo que se disputó en el Millerntor-Stadion y que el barrio participó con la ficticia identidad de “República de Sankt Pauli” junto a cinco selecciones no reconocidas por la FIFA,como es el caso de Zanzíbar, Groelandia, Gibraltar, Tíbet y República Turca del Norte de Chipre, esta última, campeona del torneo. La celebración de esta competición le supuso a los organizadores diversos conflictos con la FIFA, la UEFA y la embajada de China en Alemania. El homólogo de este equipo en España podría ser el
Rayo Vallecano, salvando las diferencias, por su condición de equipo barrionalista, antifascista, obrero, humilde y que lucha contra el fútbol negocio y los grandes de la ciudad. Otro ejemplo similar se puede ubicar en la región de la Toscana (Italia), se trata de la
AS Livorno. Este club es un referente por haberse declarado abiertamente comunista, debido a que dicha localidad fue el origen del nacimiento del Partido Comunista Italiano (PCI). En esta ciudad no es difícil encontrar símbolos comunistas, antifascistas, calles con nombres de revolucionarios o monumentos a partisanos.
Su hinchada más radical, llamada Ultra Sankt Pauli (USP), fue creada en 2002 y se localiza en uno de los fondos. Se caracterizan por acompañar al equipo allá donde juegue, convertir el campo en una caldera y ser el jugador número 12 en cada partido. No paran de ondear banderas piratas, del equipo, de Jamaica y del
Che Guevara, además de realizar tifos y cánticos durante los encuentros, creando una impresionante atmósfera de animación.
El gran rival deportivo del Sankt Pauli es el HSV Hamburgo, el club grande de la ciudad. El derby hanseático es uno de los más calientes de Alemania junto al derby del Rhur, disputado entre el Borussia Dormunt y el Schalke 04. El otro gran rival del equipo es el Hansa Rostock, se trata de una entidad cuya sede se encuentra a 150 km de Hamburgo y donde se concentra gran parte del electorado de extrema derecha de Alemania, conllevando un importante conflicto ideológico en dichos encuentros que ha desencadenado graves altercados entre los aficionados. Por otro lado, los piratas están hermanados con el
Celtic de Glasgow al compartir con ellos valores sociales, ideológicos y su condición de subversivos, ya que los católicos están en contra del Reino Unido, el unionismo y la monarquía británica. Por otro lado, se muestran a favor de la independencia de Escocia y la anexión de Irlanda del Norte a la República de Irlanda.
Rock, punk y romanticismo contra el fútbol negocio
El FC Sankt Pauli está muy ligado a la música, especialmente al rock y al punk. El conmovedor Hell Bells de AC/DC acompaña al once de los piratas cuando salta al campo, una forma de aventurar al rival que va a conocer el infierno durante los siguientes 90 minutos. Otro aspecto de lo más curioso es que la megafonía del estadio celebra los goles con “Song 2″ de Blur. El grupo alemán Le Fly compuso “We Love St. Pauli”. Esta canción, cuyo videoclip no deja indiferente a nadie, se ha convertido en himno oficioso del equipo. Turbonegro compuso una versión de su canción “I got erection” adaptada al idioma alemán y al club de Hamburgo. La banda de punk rock estadounidense Bad Religion disputó un partido benéfico con su filial en el año 2000. Otro referente del ska-punk italiano como Talco, incluyó “Sankt Pauli” en su disco “Mazel Tov” de 2008 . El grupo de dub, reggae y jungle Asian Dub Foundation ha mostrado en repetidas veces su admiración hacia el St. Pauli. Muchos son las formaciones musicales que han colaborado con el equipo o le han mostrado sus simpatías. No es sólo un referente en el mundo del deporte, sino que también lo es en el ámbito político, cultural y en el musical.
En definitiva, el FC St. Pauli es algo único, ya que se trata de un pequeño equipo de marcada orientación izquierdista, punk y underground que le ha llevado a ser adorado y odiado a partes iguales. Aunque no obtengan grandes resultados deportivos, su estadio siempre está lleno, independientemente de la categoría del rival y la división en la que se encuentre. Se ha sobrepuesto a diversos problemas económicos, a pesar de contar con un presupuesto limitado. El gran palmarés de este club es su masa social, el verdadero tesoro que los “piratas” cuidan con mucho mimo y recelo.
El FC St.Pauli es la bandera que enarbola la insurgencia y rebeldía de lo establecido. Es un ejemplo de las voces críticas existentes en este deporte para acabar con el fútbol mercantilizado, donde priman los intereses de las federaciones y los acuerdos televisivos inciden en el juego y desvirtúan la competición. Hacen faltan más equipos como este que traten de dar otra visión al balompié y hagan que el aficionado sea el verdadero protagonista. Los deportes se están deshumanizando poco a poco, consiguiendo que los románticos del fútbol ya no tengamos cabida en este circo y tengamos que conformarnos con recortes de periódicos añejos, álbumes de cromos polvorientos y los recuerdos de clubes que hicieron historia frente a los más grandes. Siempre podremos refrescar la memoria y rememorar aquel Rayito “Matagigantes”, el “Queso Mecánico”, el “Súper Dépor” o cuando el C.F Extremadura y el CP Mérida aparecían en los FIFAs de los 90. Son equipos históricos que demostraron que el dinero no lo era todo, hazañas que son utópicas en la actualidad, era el fútbol del pueblo.
También podemos recordar la magia que tenía la Copa del Rey y que ahora ha desaparecido. Cuando Toledo, Numancia, Novelda o Figueres fueron capaces de hacer tambalear los millonarios presupuestos de Real Madrid y FC Barcelona, demostrando que un partido no se gana únicamente con nombres.
Actualmente el Sankt Pauli se escuentra sexto a cuatro puntos del ascenso directo a la 1.Bundesliga, esperemos que los “Piratas” asciendan a la máxima categoría y con su lema de ¡¡a las armas!! sean capaces de remover conciencias por los campos de primer nivel. Su ascenso significará la presencia de una voz contestataria y disidente en la élite, además de hacer un poco más feliz al aficionado melancólico que añora ese fútbol añejo impregnado de barro, dureza, gradas sin asientos y nicotina en los banquillos. Esa época en la que los bigotes, barbas y largas melenas poblaban los terrenos de juego y la gomina no tenía sitio en el deporte.
¡¡ La vida pirata, la vida mejor!!