La estrella de Estados Unidos exige mejor trato a las mujeres y abandera una demanda contra la federación de su país por discriminación salarial
Alex Morgan, figura de la selección de Estados Unidos, debuta con su equipo este 11 de junio en el Mundial de Fútbol Femenino de Francia. Será su tercer Mundial para ella, la tercera con más partidos tras Ali Krieger y Carli Lloyd. Ha marcado tres goles en la competición, pero nunca ha sido campeona.
Ella es la líder en el campo, y fuera de él, se ha erigido como una voz por la igualdad. El pasado Día de la Mujer, el 8 de marzo, Morgan y sus compañeras de la selección presentaron en un juzgado de Los Ángeles una demanda contra la federación de fútbol de Estados Unidos por discriminación salarial.
Su equipo femenino ha ganado tres Mundiales (1991, 1999 y 2015), y tiene el récord de audiencia de un partido de fútbol en el país. Y, sin embargo, entre sueldo y variables, solo pueden aspirar a ganar el 38% de lo que ganan los hombres.
Morgan, líder de la demanda, también rechaza la idea de que los deportistas no deban meterse en política. Critica al presidente Donald Trump y dice que si ganan la Copa del Mundo y las invita a la Casa Blanca, ella no irá.
Morgan empezó a jugar al fútbol a los 14 años en su instituto de Diamond Bar, un suburbio de Los Ángeles. Tiene experiencia internacional desde que entró en el equipo sub 20 a los 17 años, mientras estudiaba en la Universidad de California en Berkeley y jugaba en el equipo universitario, los California Golden Bears. Marcó el gol de la victoria en el Mundial sub 20 de Francia de 2008.
Desde 2015 juega en el Orlando Pride. Es la sexta anotadora de la liga (que tiene seis años de antigüedad) con 35 goles en 87 partidos. En el 2014 se casó con el también futbolista Servando Carrasco, de origen mexicano, recién contratado por Los Ángeles Galaxy.
Con información de El País