El conflicto norirlandés, las Brigadas Internacionales y el repudio a la Corona Británica fueron avivados en las gradas por la afición del Celtic.
Por Camilo Rueda Navarro
La afición del Celtic de Glasgow, y en particular la barra Green Brigade, han estado figurando en medios deportivos y en las redes sociales el último mes, remarcando su identidad política.
Primero fue en el clásico de la ciudad, el célebre Old Firm ante el Rangers. En esta ocasión, la agrupación exhibió un mosaico que evoca el conflicto norirlandés: un niño con máscara antigas y una bomba molotov, originada en una fotografía captada en la Batalla del Bogside de 1969.
La imagen original se produjo en medio de revueltas entre residentes católicos del barrio Bogside, en Derry, y la policía. Los disturbios se prolongaron por tres días y causaron varios muertos y centenares de heridos. La llamada Batalla del Bogside agudizó el conflicto entre nacionalistas republicanos y unionistas probritánicos.
La foto del niño se volvió un ícono de Bogside y años después fue recreada en uno de los murales de Derry, un sector identificado con el nacionalismo irlandés. Este 4 de septiembre fue revivida en una bandera desplegada por la Green Brigade, barra del Celtic, acompañada por el eslogan “Today we dare to win” (Hoy nos atrevemos a ganar).
Que viva la República
En el partido siguiente, las banderas del Celtic volvieron a recorrer los pantallazos y registros fotográficos. Esta vez ante el Real Madrid, en partido por la Liga de Campeones de Europa. Entre el verde y blanco del Celtic, ondeó la bandera de las Brigadas Internacionales, que reunieron a combatientes de múltiples nacionalidades que se vincularon al bando republicano en la Guerra Civil Española (1936-1939).
Para luchar contra el franquismo, miles de voluntarios de todo el mundo se vincularon a las brigadas, entre ellos británicos e irlandeses, cuyo legado es motivo de honores, como este del Celtic.
¡Aplaude!
La hinchada del Celtic siguió dando de qué hablar tras la muerte de la reina británica Isabel II. En otro partido de la Liga de Campeones, y tras la muerte de la monarca, exhibió una bandera con la frase “Fuck the Crown” (Que se joda la Corona).
Mientras que la UEFA abrió un proceso contra el Celtic por esta pancarta, la Liga Escocesa optó por cambiar el tradicional minuto de silencio por uno de aplausos en el partido de este club ante el St. Mirren. Con esta medida se buscaba neutralizar un eventual abucheo de la parcial verde.
Sin embargo, se produjo un nuevo saboteo al tributo real, pues la afición del Celtic desplegó una nueva pancarta que decía “If you hate the royal family, clap your hands” (Si odias a la familia real, aplaude), a la vez que entonaba cantos con este mismo llamado, haciendo una ingeniosa burla de quienes se sumaron a los aplausos por la fallecida monarca.
Si bien el Celtic tiene su sede en territorio escocés, su origen está fuertemente entrelazado con la migración irlandesa del siglo XIX, identificada con el catolicismo y el republicanismo antimonárquico.