“No nos están dejando trabajar” y “la FIFA está imponiendo la venta de marcas como Coca Cola”, dicen las personas vendedoras ambulantes quienes reflejan la otra cara del Mundial de Fútbol Sub 20 que se celebra en nuestro país. Las esperanzas de obtener buenas ventas en el marco de este campeonato están por el suelo. Las cerca de 300 personas que se dedican a la venta informal dentro del Estadio Atanasio Girardot no lo ponen en duda.
Por Notiagen
Las personas vendedoras ambulantes son todas aquellas que venden bienes y servicios en los espacios públicos. Aunque no todos los vendedores ambulantes trabajan sin licencias o protección legal, la mayoría lo hace.
Las personas que trabajan en la Unidad Deportiva Atanasio Girardot tienen contrato de aprovechamiento económico del espacio público con la alcaldía de Medellín dentro de las instalaciones de esta unidad deportiva y fueron autorizadas para desarrollar sus ventas durante el certamen futbolístico.
La mayoría de los negocios de los vendedores ambulantes son operaciones de una sola persona que utilizan, en función de sus necesidades, la mano de obra no remunerada de sus propios familiares. Algunos venden en la comodidad de puestos techados, otros lo hacen simplemente al aire libre sentados al lado de una canasta o una manta que muestre su mercancía.
Una de las restricciones que afecta de manera directa las ventas, son los tres anillos de seguridad que han sido instalados por parte de la policía y que rodean casi en su totalidad el plantel deportivo. En las fechas en las que habrá partidos de fútbol no se permitirá el ingreso del público, sólo es permitida la persona que tenga el boleto para el estadio. Cabe destacar que la Unidad Deportiva Atanasio Girardot es muy concurrida por deportistas, personas aficionadas y profesionales, y que son en buena medida quienes les compran a personas de ventas informales. Pero, por ahora, no les queda otra opción que ofrecer los productos como las frutas, los helados, las gaseosas o camisetas deportivas a la soledad que permanece por un buen rato hasta que llegue la afición al estadio.
Esta restricción inclusive ha afectado a varias personas de ventas informales, quienes aun con documento autorizado por la Alcaldía les han negado la entrada al Atanasio y han tenido que sostener alegatos con la policía por este motivo.
Pero hasta aquí no llega la pesadilla. Hasta el jueves 28 de julio de 2011 no estaba permitida la venta de cerveza por parte de la Administración Municipal, un producto que con su venta alivia un poco la precaria situación económica de muchas personas en el país en este tipo de eventos. Sólo el 29 de julio en la mañana se anunció la autorización de su venta pero en vasos desechables, ¿por qué esta situación?, porque las marcas patrocinadoras del evento, son privilegiadas para su venta y consumo dentro de las instalaciones deportivas. Además, situaciones que ponen de manifiesto la presión de estas marcas como Coca Cola, se vieron cuando promotores de esta empresa pasaron por cada uno de los locales poniendo su publicidad y exigiéndole a cada persona ventera que si tenía una nevera o refrigerador con una marca diferente, ejemplo Postobón, debía colocarle un forro negro hasta que se terminara el certamen futbolístico. Una señora ventera se rehúso a ponerle este forro a una de sus neveras, por lo cual los promotores de esta marca procedieron a tomarle fotos.
Un intento de marcha
Para el viernes 29 de julio en la mañana se dieron cita cerca de 40 personas que querían protestar por la situación en la que están sumidos las personas vendedoras del Atanasio. Encontrándose en la carrera 70 con Calle Colombia (calles que rodean la unidad deportiva), cuando ya daban inicio a su marcha, varios agentes del Escuadrón Móvil Anti Disturbios (ESMAD) y una tanqueta se los impidió, alegando que no había permiso para llevarla a cabo.
Con las pancartas y los megáfonos decidieron quedarse apostados en la acera, vociferando y denunciando sus problemáticas, mientras que algunos miembros de la Secretaría de Espacio Público los fotografiaron.
Con la resignación a cuestas, ahora estarán a la expectativa de recoger de las ventas el dinero suficiente para pagar el arriendo de los locales y los servicios públicos, que según señalaron, el 80% de las personas que trabajan en estas condiciones en el Atanasio están en mora, asimismo deberán hacerlo para recoger el capital inicial o capital semilla durante los siguientes días ya que no poseen ahorros o un capital estable y dependen de sus ventas para recoger y de nuevo invertir.
Publicado originalmente el 2 de agosto en notiagen.wordpress.com
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario